Valvula de neumatico de su coche con fuga: ¿qué hacer?

Una válvula de neumático con fugas puede convertirse rápidamente en un problema embarazoso e incluso peligroso. Este componente discreto y a menudo pasado por alto desempeña un papel crucial en el mantenimiento de la presión de aire en el neumático. Si notas una pérdida anormal de presión, es esencial actuar con rapidez. Aquí tienes todo lo que necesitas saber sobre las causas, soluciones y pasos a seguir en caso de fuga en la válvula.

¿Qué puede provocar una fuga?

Una válvula de neumático con fugas puede convertirse rápidamente en un problema embarazoso e incluso peligroso. Este componente discreto y a menudo pasado por alto desempeña un papel crucial en el mantenimiento de la presión de aire en el neumático. Si notas una pérdida anormal de presión, es esencial actuar con rapidez. Aquí tienes todo lo que necesitas saber sobre las causas, soluciones y pasos a seguir en caso de fuga en la válvula.

¿Cuándo debe cambiar la válvula de su neumático?

Si la fuga procede de la propia válvula, suele ser más rápido y seguro sustituirla que intentar repararla. Debería plantearse la sustitución en los siguientes casos:

  • La válvula está visiblemente agrietada o dañada.
  • El neumático sigue perdiendo aire a pesar de los intentos de apretarla o limpiarla.
  • La válvula metálica presenta una corrosión importante.

El coste de una válvula de repuesto es asequible: por una válvula de goma convencional, espere pagar entre 2 y 5 euros por cada una. Las válvulas metálicas o equipadas con sensores TPMS son más caras: oscilan entre 20 y 70 euros, según el modelo y la tecnología incorporada.

¿Qué herramientas se necesitan para reparar la fuga?

Antes de empezar, necesitará las siguientes herramientas:

  • Un levantaválvulas: Esta herramienta se utiliza para extraer el núcleo de la válvula para su limpieza o sustitución.
  • Un manómetro: Para comprobar la presión del neumático antes y después de la reparación.
  • Un compresor o una bomba: para volver a inflar el neumático una vez terminada la reparación.
  • Solución jabonosa: Para detectar la fuga, aplique una pequeña cantidad a la válvula y observe si se forman burbujas.
  • Una válvula de repuesto y un tapón nuevo.

Si vas a sustituir la válvula por completo, necesitarás una herramienta de desmontaje de neumáticos para acceder al interior del neumático.

Pasos a seguir para gestionar una fuga en una válvula

Si quieres reparar la fuga tú mismo, sigue estos pasos: 

Identificación de la fuga

Aplique agua jabonosa a la válvula y observe. Si aparecen burbujas, esto confirma que hay una fuga. También puede oír un ligero silbido si la fuga es grave.

Limpiar o reapretar la válvula

A veces una simple limpieza es todo lo que necesitas. Desenrosque la tapa de la válvula, limpie el interior y apriete el núcleo con un extractor de válvulas. Si eso no es suficiente, tendrás que sustituir la válvula.

Sustituir el núcleo de la válvula

A veces una simple limpieza es todo lo que necesitas. Desenrosque la tapa de la válvula, limpie el interior y apriete el núcleo con un extractor de válvulas. Si eso no es suficiente, tendrás que sustituir la válvula.

Cambiar la válvula completa

Si el problema persiste, habrá que sustituir toda la válvula. Esta operación requiere desmontar el neumático para acceder a la base de la válvula. Retire la válvula vieja con una herramienta especial, inserte la nueva y vuelva a montar el neumático. Este paso suele ser mejor que lo realice un profesional si usted no está equipado.

Vuelva a inflar y compruebe el neumático

Tras la reparación, vuelve a inflar el neumático a la presión recomendada por el fabricante. Haz una última prueba de estanqueidad con la solución jabonosa y vuelve a colocar el tapón, que debe estar limpio y en buen estado.

Una válvula con fugas no es un problema que deba tomarse a la ligera, ya que puede provocar una pérdida de presión que comprometa la seguridad y la eficacia de sus neumáticos.

Es esencial identificar rápidamente la causa de la fuga y tomar las medidas adecuadas. En casos sencillos, puede bastar con apretar o sustituir el núcleo. En el caso de daños más graves o de una válvula metálica dañada, suele ser necesaria una sustitución completa, realizada idealmente por un profesional. Manténgase alerta y recuerde comprobar regularmente el estado de sus válvulas para evitar estos inconvenientes.